Torre de Canyamel

Dada su larga historia y su buen estado de conservación la Torre de Canyamel es una visita obligada en la isla. Se cree que fue construida en la época árabe, pero no fue adaptada como torre de defensa hasta el siglo XIII, bajo el dominio de Jaime I. La torre tiene 23 metros de alto y fue establecida en una posición estratégica para velar sobre la costa y servir de refugio  para los habitantes de la zona ante posibles invasiones. Se puede visitar su interior y disfrutar de unas preciosas vistas de la bahía que le da nombre. Durante el verano se organizan numerosos eventos en la torre, como conciertos, obras de teatro y exposiciones de arte.