La hermana pequeña de s´Arenal Gros, es también una cala muy familiar. Tiene unos 60 metros de largo, está entre 2 colinas y en frente de un pequeño hotel. Debido a este a veces se llena un poco, pero sólo hasta la hora de comer (que suele ser pronto) o de cenar ( que también suele ser pronto) .
Como s´Arenal Gros, esta cala resulta divertida para los peques, sitios para descubrir y para jugar, tiene unas casetas varadero a su izquierda. El fondo es arenoso y no tiene mucha profundidad.
Hamacas y duchas, a tu espalda tienes un pequeño restaurante ( el del Hostal) en el que se cocinan platos ibicencos, los arroces los bordan.
Las casetas varadero ( varadors en catalán), son rampas guía de longitud variable, hechos antiguamente con madera de sabina ( ahora hay algunos que tienen postes de teléfono) que consisten de dos palos paralelos separados por un metros de distancia, con travesaños para mantenerlos fijos en su distancia. Su función es la de subir o bajar el barco al ma.
En el lado de tierra, casi todos los “varadors” son simplemente una pequeña casa dónde el barco “duerme” y donde se guarda todo tipo de aparejos de pesca, esto se hace para protegerlos del sol y de la humedad. Para construir estas casetas, los pescadores solían aprovecharse de la madera que traía ( y trae) el mar. Lo que hace que no haya dos casetas que sean iguales aunque sigan el mismo patrón para construirse.
En este rincón en concreto hay alguno que se ha excavado en la tierra para ahorrarse piedra y madera.
Las casetas varadero están protegidas, por favor respeta las rampas y los aparejos que puedas encontrar. Si quieres tomar el sol allí no hay problema, si ves que hay algún pescador trabajando pide permiso, no habrá problema.