Los orígenes de esta construcción remontan al año 1318, cuando se decidió construir una capilla en el Puig de Sant Salvador (509m) para protegerse de la plaga de peste que estaba asolando la isla. El santuario fue construido posteriormente, entre 1707 y 1716. El camino para llegar hasta aquí no es fácil, ya que se trata de una carretera bastante estrecha con muchas curvas. Se puede hacer en coche con un poco de paciencia o a pie si tienes ganas de hacer bastante deporte. El esfuerzo sin duda se verá recompensado, las vistas de Cabrera y prácticamente toda Mallorca son espectaculares. También hay un restaurante y un área de picnic si prefieres organizar una comida rodeado de árboles.