Playa de Cala San Vicente

Si los vecinos de San Carlos ( “es Carlinos”) han tenido siempre entre los ibicencos cierta clase de respeto por su carácter especial, los tipos de la Cala (“es Caleros”) no han quedado a la zaga, están ahí, ahí….les gusta la juerga, las bromas, la música alta, en tiempos de nuestros abuelos tenían fama de rebeldes, de contrabandistas, de “guerrilleros”…buena gente. Hasta mediados los años 30 del siglo pasado hasta aquí sólo se podía llegar vía marítima desde Santa Eulalia o cualquier otro puerto cercano, o caminando atravesando montañas. En aquella época eran pocos los que tenían caballo, incluso una mula para acarrear peso o para desplazarse.

Después de unos 15 minutos por una carretera llena de curvas que bordea la costa llegamos aquí desde San Carlos, abandonamos el municipio de Santa Eulalia y nos plantamos en el municipio de San Juan. La última curva antes de llegar a la Cala tiene unas vistas en alto de la playa espectaculares. Ojo si quieres pararte aquí para hacer la foto, vigila donde pones el coche o la moto y vigila el tráfico.

Una playa ancha, arenosa, larga, con aguas claras y vistas sobre Tagomago ( la de Norma Duval y Matías Kuhn, la de la controversia, investigad un poco o preguntad allí). Un paseo tras la playa lleno de restaurantes, souvenirs, kioskos de prensa, terrazas, un beach club a la derecha. Se sirve comida internacional, platos ibicencos, paellas….casi todo tiene cabida en esta magnífica playa.

Una de las favoritas por la gente de Ibiza, y bastante concurrida los fines de semana.